Acaba 2019, que cierra la década de mayor consumo en la historia y ya estamos a las puertas de la Navidad, en las fechas de mayor consumo de todo el año. Durante este 2019 que pasa hemos conocido datos y noticias medioambientales cada vez más inquietantes y cerramos el año más conscientes que nunca de la huella que nuestras actividades dejan en el planeta.
- En este 2019 la temperatura media mundial estuvo 1’1º por encima de los niveles preindustriales; en efecto, 2019 cierra la década con mayor número de fenómenos extremos desde que existen registros.
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2019 pasará a la historia como el año de la toma de conciencia y la presión de la opinión pública que demanda menos declaraciones y exige más acciones. Y como el año en que la Eurocámara ha declarado la emergencia climática.
- Llegamos al final de este año con la COP25 que, aunque en muchos sentidos decepcionante, ha servido para tomar el pulso a la inquietud social, para que los científicos pongan las evidencias sobre la mesa, y para constatar que cada vez más organizaciones y un número mayor de empresas se unen a la alianza, lo que demuestra que el capital privado también se mueve hacia una economía circular.
Si somos cada vez más conscientes, ¿seremos capaces de reducir el impacto ambiental de estas fiestas de Navidad 19?
- Pensemos antes de cada compra: por pequeña y casual que parezca, cada una supone un paso hacia el futuro que queremos. Practiquemos el consumo crítico.
- Cuando se trata de hacer regalos, hay opciones como regalar actividades o servicios, regalar sensaciones en lugar de objetos: muchas veces unas entradas para un espectáculo, una cena especial o la adopción de una mascota -siempre consensuada- tienen mayor efecto en la percepción y el recuerdo que las cosas materiales. Aquí os dejamos algunas buenas ideas.
- Si optamos por los objetos, que sean útiles y duraderos, mejor si contribuyen a mejorar el medio ambiente: bicicletas, plantas... Elegir productos hechos con materiales reciclados o reciclables.
- Envolverlos reutilizando papel de revistas o periódicos o papel de envolver reciclado. Una opción excelente es la envoltura con kraft reciclado porque tiene infinitas opciones de personalización. La cinta de papel engomado, además de sus propiedades únicas para la seguridad y la sotenibilidad en el embalaje, resulta increíblemente versátil a la hora de preparar envoltorios muy especiales.
Utilizar papel y cartón en nuestros embalajes es la mejor opción, porque son 100% reciclables: la fibra de celulosa puede ser reciclada incluso hasta 6-7 veces sin pérdida de calidad.
En España la recogida selectiva de papel y cartón ha crecido por encima del 11% -16,6% en grandes ciudades- y multiplica casi por 6 el incremento de consumo de papel, que fue de 1,9% en 2018. La industria papelera en España es la tercera que más recicla en Europa y garantiza el reciclado de la totalidad del papel recogido: este año reciclará más de 5.100.000.000 kgs.
Reciclar sin separar con papel engomado
En estos días de regalos, después de su uso, los embalajes y cajas de cartón pueden ser reutilizados de muchísimas maneras: son días para compartir también creatividad. Si no se reutilizan deben ser depositados, por supuesto, plegados para que sólo ocupen el espacio necesario, en el contenedor azul. Es muy importante no introducir otros materiales como plásticos en forma de cinta de embalar o cinchas de cierre plásticas que dificultan el reciclaje. Recordamos que, si los precintos de las cajas son de papel engomado, no es necesario separarlos del cartón para su correcto reciclado.
Consumir más no nos hace más felices, sino todo lo contrario. Disfrutemos del tiempo compartido con las personas queridas que tenemos alrededor y con las que no suelen estar físicamente cerca el resto del año: preparemos actividades y vivencias en común; y no olvidemos acercarnos a la naturaleza para disfrutar de todos sus beneficios también en estos días navideños de invierno.
¡FELICES FIESTAS 2109!
